Reiniciando Babel: Babel revisitado en el texto...
La idea de continuar escribiendo en este blog es que se conforme una escritura que comience a tejerse en el sentido de lo infinito y eterno como posibles modelos de una escritura sin fin, una escritura que nunca termina, y tal como se menciona, " Salvador Elizondo fue un escritor de cuadernos, más que de libros. El cuaderno era el horizonte mental más apropiado para una escritura... como la suya. Escribiendo cuadernos... quiso ser el perpetuo autor de un primer y único libro. Rehuyó el segundo, alargando indefinidamente el primero.. .". No es Salvador Elizondo nuestro ejemplo de escritura, aunque es seguro que sus textos están dentro de otros textos que hemos leído, sino que es la frase que aquí transcribimos un ejemplo claro de ese alargamiento, hasta el infinito, de la escritura. Los cuadernos azul, rojo y amarillo, cuadernos de notas o de trabajo, forman parte de las estructuras mentales, de los mundos lingüísticos, que hemos trabajado durante ya hace algunos años, y que a