Mensaje y Palabra

La Palabra de Dios, entre lo divino y lo humano
2 Timoteo 3:16,17
(16) Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,
(17) a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.

Mes de la Biblia que coincide con el año del apóstol Pablo.
Año de Pablo: 28 junio 2008 - 29 junio 2009.
Invitación a escribir: poemas, ensayos, libros, o releer las cartas. Hacer algo importante para nuestra vida, no quedarnos indiferentes.
Más que celebrar al apóstol: pensar y repensar la Biblia como aquella que contiene la revelación inspirada de Dios.
Necesario: meditar en los tesoros guardados; en su profundidad, riqueza y sabiduría.
Recordar a Job y su viaje, por el Espíritu, al abismo del mar y a las lejanas galaxias.
Viajar a las profundidades de la Biblia, por el Espíritu, como Job.
Pasaje para saber cómo adentrarnos a los abismos de la Palabra escrita, viva y espíritual de Dios: 2 Timoteo 3:16:
Toda la Escritura es inspirada por Dios
1. El contenido de la Biblia es inspirado por Dios: letra, palabra, escritura completa, todo tiene su origen en la inspiración de Dios.
2. Pero la escritura es una construcción humana, y Dios utilizó esa construcción para la estructuración de su Palabra escrita.
Así afirmamos: La Palabra de Dios se encuentra entre lo divino y lo humano.
Escritura
Escritura: conformada por el texto, formado a su vez, por palabras, conceptos, ideas.
Escritura: estructura textual a partir de los anteriores elementos.
Texto: textere, tejer. El texto como estructura que se teje a partir de las partes que lo construyen.
Imagen: Leer y escribir es tejer y destejer hasta formar un nuevo texto.
Ejemplo: Los evangelios se interrelacionan, y encontramos que versículos de Mateo se relacionan con Lucas o Marcos.
Escritura como construcción: es una construcción constante, que se enriquece con los nuevos conocimiento, pero que su riqueza es porque son miles de años de reflexión y meditación humana.
Inspiración
Inspiración: acto de atraer aire a nuestro cuerpo, la acción de respirar.
Inspiración: Dios nos llena con su Espíritu, nos da nuevas perspectivas dentro de nuestro pensamiento.
Vasos de barro: Biblia: descripción del ser humano = vaso de barro; hombres que escribieron la Biblia: vasos de barro llenos del Espíritu de Dios.
Ejemplo en la inspiración derramada: vaso lleno, agua derramada = moja todo a su paso. Palabra inspirada por Dios: derramada como agua, corazones llenos y desbordados. Somos transformados porque Dios está en nosotros, aun siendo vasos de barro.
Nota: ser transformados por Dios, es elevarnos a nuevos niveles, y nunca volver al nivel original.
Escritura + Inspiración
Complejidad de la escritura inspirada: la escritura ya es compleja: pensar, entender y conocer lo que se quiere escribir. Escritura inspirada aun más compleja: entre el tejido del texto va tejido el aspecto espiritual.
Entre lo divino y lo humano: el tejido textual y el tejido espiritual, unidos, hacen de la Palabra lo que ya señalamos: la Palabra de Dios entre divina y humana. Dios da su Palabra por medio de un lenguaje comprensible: nuestro lenguaje, escrito o hablado.
2 Pedro 1:21
Porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo
Otra traducción:
Porque la profecía no ha tenido su origen en la voluntad humana, sino que los profetas hablaron de parte de Dios, impulsados por el Espíritu Santo.
Otra forma de leer: profecía = palabra/palabra de Dios. Los santos hombres de Dios hablaron = escribieron. La inspiración es el impulso de Dios.
El mensaje de Dios hablado: la Palabra de Dios: texto divino y humano = inspiración y escritura: así Dios nos comunica su verdad.
Dios da su mensaje comprensible para nuestra edificación. Sin comprensión: no hay edificación.
No por voluntad humana: no por nuestra voluntad existe la Biblia: en nuestro corazón no pudo nacer la idea de escribir la Palabra de Dios.
"No ha tenido su origen en la voluntad humana"
Pecadores redimidos: nada bueno en nosotros. La inspiración de su Palabra es por pura gracia: por amor.
Ejemplo: Literatura universal -niegan que Homero, Miguel de Cervantes Saavedra y Shakespeare sean autores de sus obras-, por la perfección encontrada en sus escritos. Tuvieron que ser más autores, y no sólo un hombre escribiendo.
Los autores bíblicos puestos en duda: la Biblia ha inspirado al ser humano y lo ha transformado: contiene la verdad sobre nuestra salvación.
Podemos dudar de que sean los escritores bíblicos los autores intelectuales de la Biblia: un libro que transforma vidas, que salva: solamente pudo ser el Espíritu de Dios su verdadero autor. Solo en su mente y en su corazón pudo nacer una idea como la Biblia.
En cada versículo que leemos, se siente la inspiración o el impulso del Espíritu Santo.
La caja, el laberinto y la palabra como casa
La caja: la Palabra de Dios es como una caja cerrada: necesita combinación para ser abierta.
La clave para abrir la Palabra/caja: La Palabra de Dios, como caja que necesita ser abierta, requiere de dos cosas en las personas: oración y pensamiento que conoce.
La caja se abre: la Palabra de Dios se abre ante nosotros; encontramos su profundidad y riqueza. La profundidad de la Palabra de Dios es señalada en este versículo: Romanos 11:33:
¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios e inescrutables sus caminos!
Otra traducción:
¡Qué profundas son las riquezas de la sabiduría y del conocimiento de Dios! ¡Qué indescifrables sus juicios e impenetrables sus caminos!
Otra traducción:
¡Qué profundas son las riquezas de Dios, y su sabiduría y entendimiento! Nadie puede explicar sus decisiones, ni llegar a comprender sus caminos.
Qué es el pensamiento que conoce: para abrir la Palabra de Dios: la oración y el pensamiento que conoce. Pensamiento que conoce: acción de meditar, reflexionar y pensar la Palabra. Un pensamiento que va constamente a la Palabra y trata de comprenderla.
Dos formas de conocimiento del pensamiento: conocimiento natural: a partir de una preparación académica, o la lectura constante. Conocimiento inspiracional: Dios le revela el sentido de su Palabra. Habla a su espíritu y a su mente.
La caja permanece cerrada: la Palabra puede ser una caja cerrada: la persona puede conocer mucho, pero si Dios no revela lo escrito: nadie puede entender.
El laberinto: el interior de la Palbra: un laberinto por recorrer.
Explicación del sentido del laberinto: laberinto: camino en que podemos perder por falta de conocimiento. Mente: laberinto también en que podemos perder si no hay orden sino caos. Laberinto: caos de la existencia.
La Biblia como laberinto: la Biblia: conjunto de libros = biblioteca espiritual del creyente.
Biblioteca espiritual: traducida a muchos idiomas, biblioteca = muchas bibliotecas.
"Cada cabeza es un mundo", cada persona lee: entiende la Palabra de Dios de forma distinta.
La Biblia: un verdadero multisignificado.
Biblioteca = laberinto: todo está escrito. Una palabra te lleva a otra, y a otra, y te puedes perder.
Palabra de Dios = laberinto: El monstruo y el guía: literatura: un monstruo habita el laberinto. Si nos perdemos: devorados por el monstruo. Si Dios nos guía: no perderemos el sentido de su Palabra.
La Palabra de Dios como nuestra casa: la caja y el laberinto abiertos = la Palabra de Dios abierta en su sentido, significado. Dios guía: conocemos la profundidad de su Palabra. Entrar en ella: habitar su Palabra como si fuese una casa, un hogar, nuestra habitación. La Palabra como casa: desde ella hablamos, actuamos, pensamos; nos guía y Dios nos transforma por medio de ella. La habitamos como la casa de Dios y la casa del hombre.
Nuestras acciones y la Palabra de Dios: Pablo: la Palabra de Dios = nuevas acciones en nuestra vida.
Vivir en la Palabra: meditando en ella, reflexionando, pensando, estando en ella cada día = nos transforma o perfecciona:
(16) Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,
(17) a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.
La utilidad de la Palabra de Dios: Escritura inspirada: perfecciona al ser humano.
Acción del Espíritu: eficaz transformación o perfeccionamiento en el ser humano. La Palabra de Dios = viva y eficaz.
Fuente de agua viva: llena nuestra vida.
Por eso es que la Palabra es útil para enseñarnos, redargüirnos o convencernos de nuestros errores, corregirnos o instruirnos en justicia.
Útil: para perfeccionar al ser humano y llevarlo a la gloria de Dios.
Hebreos 4:12:
La palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón
La transformación por medio de la Palabra de Dios: la Palabra de Dios: habita la profundidad del corazón humano = Doble habitación: La Palabra habita al ser humano//el ser humano habita la Palabra.
El ser humano = la caja y el laberinto: lo recorrerá el Espíritu de Dios por medio de su Palabra: partirá y transformará al ser del hombre: Hebreos 4:12
Ser del hombre: lo muestra Jesús: "Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas" Marcos 12:30
La Palabra de Dios en nosotros: ella entra en nosotros: lampara que alumbra nuestro camino, la luz que ilumina nuestro interior.
Nosotros en ella: orar, meditar, reflexionar, pensar sobre lo que nos dice, buscar su significado.
Ella en nuestra vida: leer diario, escuchar los mensajes, buscar reflexiones, incluso buscar información en internet, y aun en la televisión.
Ella entra en nuestra vida: Dios trabaja en nuestro interior para perfeccionarnos.
La Palabra útil: significa que la Biblia es la biblioteca espiritual por excelencia en la vida del cristiano.
La Palabra como revelación: en toda la Biblia, la revelación es: Dios es Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo: Dios envió al Hijo en la persona de Jesucristo, para salvar al ser humano; y esto, por pura gracia, amor inmerecido.
Lo que se busca en la Palabra de Dios: conocimiento filosófico y teológico, descrédito de la Biblia misma, ideas para pinturas, nuevas formas de estructuras literarias.
¿Qué buscamos nosotros?
Si buscamos a Dios mismo en su Palabra, si creemos que Dios se revela en su Palabra, y que su Palabra habla de la Palabra encarnada que es Jesucristo, es porque Dios ya nos había llamado para emprender esa búsqueda.
Conclusión: la Biblia como la Palabra de Dios, se encuentra entre lo divino y lo humano, porque aunque su inspiración es de origen divino, el impulso del Espíritu de Dios, su construcción es a partir de las herramientas que el ser humano ha formado en la escritura; pero Dios ha revelado su mensaje por medio de esa escritura humana, y su revelación es Jesucristo, la Palabra encarnada, que mora entre lo divino y lo humano, verdadero Dios y verdadero hombre, que viene de Dios y se da al ser humano, por puro amor, por pura gracia.
Pregunta: ¿Y tú buscas dentro de la Palabra de Dios a Jesucristo mismo porque él ya salió a tu encuentro, y buscas que la Palabra de Dios entre a tu ser hasta perfeccionarte?