POESÍA: EL SUEÑO DE EMMANUEL

Para mi mani mani, Emanuel Hernández Hernández

Duerme ya, niño querido,

porque los angelitos

guardan tu sueño,

y Papá Dios

te cuida

te ama

te escucha

te habla...

Y en tus sueños

tú y yo

jugamos contentos,

y las risas

que escucho de momento

son de alegría

porque estamos

en el sueño...

Duerme, angelito,

porque los niños

chiquitos

tienen bonitos sueños,

y entre llanto

y risa

se ven muy contentos...

Te ves tranquilo,

te ves sonriente,

es porque eres

muy querido,

y tu alma

tiene paz

en su sentimiento...

Cuando despiertes

seguiremos jugando

a las luchas,

a los superhéroes,

con tus juguetes,

con la ciudad

del hombre araña,

con tus naves,

o con todos tus juguetes;

veremos películas,

platicaremos

un momento,

me contarás

qué fue lo que viste

mientras estabas

en tus sueño...

Ya luego al kinder

seguirás jugando,

porque entre risa y juego,

la vida se te viene

sonriendo...

Después nos iremos

a pasear al centro,

y compraremos revistas

o cómics,

o juguetes nuevos,

y si vamos al súper

veremos los juegos

que ahí se exhiben,

hasta irnos de nuevo...

Mientras, que algunos lo digan,

que se nos va la vida

entre risas y juegos,

pero es que así

te la pasas contento.

Mientras sigue durmiendo,

mi angelito,

mi niño querido,

que Papá Dios

guarda tu sueño...