Postulado # 101 Génesis 11:5 Comentario

5 Pero el Señor bajó a ver la ciudad y la torre que los hombres estaban construyendo, Pero el Señor bajó para observar la ciudad y la torre que los hombres estaban construyendo, Bajó Yavé a ver la ciudad y la torre que estaban haciendo los hijos de los hombres, Y descendió el Señor a ver la ciudad y la torre, que edificaban los hijos de Adán. Y descendió Jehová para ver la ciudad y la torre que edificaban los hijos de los hombres.

Yavé, que significa “Yo soy el que soy”, “Yo soy”; el nombre que no es nombre, sino que describe la esencia, baja a encontrarse con los hijos de Adán, que son los hijos de los hombres. ¿Qué significa “Yavé, Yo soy”, y “los hijos de Adán”? Encontrar en estos dos nombres o significados, el sentido de lo que el relato enseña, es mostrar la relación que existe entre ellos. Yavé, como el Ser, no es el ser de los hombres; el otro nombre de Yavé, en el Nuevo Testamento, es la Palabra, el Logos y el Verbo: la palabra es la conformación del ser del hombre, “en la casa de la palabra habita el hombre”; el logos hace patente lo que se oculta, desocultándolo, manifestándolo, mostrándolo por medio de la palabra hablada, lo muestran; verbo es la acción dentro de la oración, lo que hace que sea, “llama las cosas que no son, como si fuesen”
[1]; Yavé trae desde la nada a las cosas que son, ha creado desde la nada, y lo que no era, ahora tiene ser, porque su voz ha mandado, una voz silenciosa, una voz desubicada, y le da ser, existencia. Lo que no es, ahora tiene ser, ahora existe. Él ve las acciones de los hijos de Adán, pero no unidos a él, sino separados de él, y Yavé, que es el ser de los hombres, no está en los hijos de Adán, sino separados, y resuena el “Dónde estás tú”[2], que sonó en el huerto. Los hijos de Adán construyen la ciudad y la gran torre; ya señalamos que ellos construían una nueva palabra, construían su propio ser, señalado de forma metafórica en la torre, pero era una torre hecha a partir de materiales frágiles, lo que nos muestra que su nueva palabra es frágil –una torre hecha de ladrillo y betún; una palabra, su habitación, hecha de otro ser que no es el Ser de Dios. Una torre frágil, una casa frágil.
[1] Romanos 4:17
[2] Génesis 3:9

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