ENSAYO: LA FE FRENTE AL MUNDO POSMODERNO

"Es la fe la certeza de lo que se espera

y la convicción de lo que no se ve"

¿Qué es la fe en este mundo posmoderno?

Es la perspectiva crítica frente al mundo que perdemos, el mundo que se nos va de las manos, el cual se presenta ante nosotros con horizontes de inseguridad, de amenazas, de riesgos; es lo que, aun frente al horizonte que se manifiesta, nos mantiene, nos sostiene, nos detiene, nos levanta y nos permite continuar adelante, aun por encima de la desesperación y la inseguridad: es certeza, es confianza, es creer, aun por encima de lo que hoy se nos dice, en aquello que no es posible pensar porque no se puede ver: la fe, frente al mundo posmoderno, es decir, fragmentado, acabado, líquido, en amenaza, en riesgo, es todo un reto y una posición contracultural. La fe nos permite pensar más allá del pensamiento mismo, pensar de otro modo, de un modo totalmente otro, problematizar sobre el mundo mismo y sus afirmaciones que supuestamente muestran un mundo totalmente abierto (para unos) pero con posibilidades infinitamente cerradas (para otros): afirmaciones paradógicas (aunque el mundo diga que hoy está más abierto que nunca, el mundo se ha cerrado cada vez más, en su horizonte de posibilidades infinitas, a las personas, a los niños, a los ancianos, a los hombres y mujeres, únicamente es ver las políticas mundiales, sociales, las agendas de los gobiernos, donde el ciudadano ya no figura como punto central de los gobiernos (nunca ha figurado a menos que se vuelva un objeto de estudio, un dato, un medio para continuar ordenando el mundo), ya no figura como razón de ser de los políticos, gobernantes o empresarios; solamente debemos ver las cífras, casi imposibles, casi borgesianas, casi kafkianas, de muertes, de enfermedades, de personas con hambre, y no hablamos con una visión populista, sino de crítica, porque la falta de empleo cada vez es más pronunciada, el futuro de las personas se verá afectado si esta sociedad se vuelve cada vez más de la información y del conocimiento y las nuevas tecnologías construyen la nueva tecnocracia, porque no todos tienen los medios económicamente necesarios o suficientes para tener acceso a las tecnologías de la información para poder entrar, de lleno, a esta nueva era de la información y del conocimiento y donde las competencias, el hecho de ser competentes, será una posibilidad mayor en aquellos que cuenten con los medios, y declarará, a la gran mayoría, incompetentes, ineficientes e ineficaces, y aumentarán los despidos, la falta de empleo y todo esto nos hace pensar: ¿Cuál es el fin principal de los gobiernos? ¿Qué buscan los gobiernos al implantar estas políticas sociales y educativas? ¿Hacia dónde se dirige el mundo? ¿Cuál es el objetivo principal y ultrasecreto de los gobiernos? ¿Qué nos ocultan?). La fe es, pues, la certeza en medio de la falta de certeza, la confianza frente al horizonte de falta de posibilidades, el punto crítico frente al mundo en que vivimos, nuestro sustento, nuestra confianza, lo que puede permanecer, lo que puede permitir al hombre posmoderno (es decir, el hombre falto de posibilidades económicas, e incluso el hombre sin empleo para poder cotizar en el IMSS y aspirar a una vejez tranquila, con una pensión que le permita vivir y morir sin angustias, aunque sabemos que las pensiones son criticables) continuar pensando y viviendo en medio de este mundo caótico. "La fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve". ¿Aun seguirán los muertos, los asesinados, los secuestrados, la guerra gubernamental, la falta de empleo, las competencias, la transparencia, las violaciones al derecho de vida de las personas, el hambre, la falta de posibilidades de educación, de vivienda, es decir, el caos que vive el mundo y México? La fe, por encima de la fe misma, puede ser nuestra única posibilidad en este mundo posmoderno...