ENSAYO: SIGNIFICADOS DEL CÓMIC

Hace tanto tiempo que no escribo, que no sé bien qué decir...

Sí, he copiado información, he subido algunos textos que he trabajado, algunas otras cosas como poemas, que en estos días voy a subir más, y varios documentos más.

Actualmente estoy muy metido leyendo cómics, e intento entenderlos desde una perspectiva más profunda. Y no estoy mal ni pierdo el tiempo, porque eso es lo que se ha estado haciendo desde hace algún tiempo al escribir su contenido.

Un cómic es tan profundo en su sentido, en lo que nos quiere mostrar, como un texto de filosofía o de teología, y sus fundamentos suelen ser tan literarios, que podría comparar algún planteamiento con algún cuento de Borges.

La cuestión de Tony Stark, infectado con el virus biotecnológico llamado "Extremis", y que lo llevó a tener la capacidad de hacer conexión con el universo de la tecnología digital, de tal forma, que puede controlar, desde su mente, todo un mundo de aparatos que sean digitales. De ahí que pueda dominar su propia armadura. La película "Iron Man" solamente es el principio, pero entusiasma verla porque comienza una nueva era narrativa sobre cómics.

Pero hay formas de narrar estos textos visuales que podríamos catalogar de deconstrucciones. Sí, la forma de lectura que Derrida propuso; ese desarmar toda la estructura para estructurarla o reestructurarla de otra forma. Hay cómics que desmontan y montan el universo entero, y elementos tan importantes como el "No más mutantes" de la Bruja Escarlata, que viene a transformar la realidad misma.

Es todo un mundo de reflexiones, filosofías, y cosas por el estilo, la que rodea al cómic.

Películas como El protegido, muestran la parte más humana del Super-héroe, y de cierta forma, sin el mismo colorido, va en la línea de Los increíbles. Hulk, de Ang Lee, es otra prueba del toque realista del cómic, y de cómo es posible hacer un "crossover" entre el cómic, el cine y alguna disciplina, como es el caso del psicoanálisis en esta última película. Por otro lado, un toque no tan serio es el que tiene La fuente de la vida, de Aronofsky, y digo no tan serio, porque recurre a la ciencia ficción o a una literatura fantástica o a otros elementos narrativos, pero parte de hacer su película, en un principio, como un cómic. Pero no es tratada con menor seriedad que las otras ya señaladas, porque toda la trama es bastante serie e interesante. Y así, podríamos pensar en 300 y Sin City, de Miller, y Constantine, de Lawrence, y muchísimas muchísimas más.

Algo interesante que tiene el cómic es que permite la fusión de elementos, como es el caso de llamarle a uno de sus personajes Hércules, nombre tomado de la mitología griega, y por otro, Goliat, tomado de la mitología hebrea. Esta unión permite una forma muy interesante de fusionar horizontes. Además de que vemos elementos políticos, tecnológicos, religiosos, etc.

Preguntas surgen en torno a los personajes: ¿Algún día Wolverine morirá, o está destinado a llevar una vida al estilo Drácula, viviendo para siempre? ¿Batman logrará superar sus traumas antes de morir, o seguirá con ellos hasta el día de su propia muerte y serán, todo el tiempo, su motor de lucha? ¿Es posible que la Mole llegue a descubrir una "cura" para su mal, dado que es totalmente de piedra? ¿Hulk, o mejor dicho, Banner, encontrará una cura para su malestar, pensando como malestar el hecho de que se transforme en Hulk? ¿Qué pasará con Spawn o Ghost Rider? ¿Irán al cielo o al infierno al morir? ¿Todos estos personajes, héroes trágicos, están destinados a sufrir pero seguir siendo héroes? ¿Es que acaso Spiderman tiene que cargar con la culpa de la muerte de su tío Ben? ¿Es su tragedia lo que les dá el heroismo? ¿Y si lograran superar todos sus problemas? ¿Y si desaparece Hulk? ¿Y si Batman desaparece porque Bruce se autoperdona, encuentra la redención, tuviera un encuentro con Dios? ¿Ciudad Gótica no quedaría a merced del Guasón? ¿Tendría, Batman, que atrapar al Guasón, al Pingüino y llevarles la palabra de Dios, para verdaderamente reformar su alma? ¿Si Peter Parker se perdona dejaría de ser Spiderman? ¿Y si muere Wolverine, el Profesor X, Cíclope, Superman, Tony Stark? ¿Hemos pensado que sus muertes, perdónes, y cosas por el estilo, tendrían repercusiones realmente serias? Cualquiera diría, "Bueno, es que no tiene importancia pensar en ellos, son cuentos, dibujos, sin valor real". Pero creo que los cómics van más allá de las páginas que repletan.

Cuando en Civil War se presentó la pelea entre Iron Man y Capitán América, lo que se estaba mostrando era una crítica al mundo tal como se encuentra estructurado hoy. Al final de la Guerra Civil, el Capitán América murió a manos de la mujer que amaba. Pero su muerte tiene implicaciones metafísicas, puesto que él es un sueño, la representación de los valores universales. En Front Line-Civil War se le presenta, al Capi, como un hombre enajenado, fuera de la realidad, que ni un blog conocía, ni el celular maneja, obviamente no manda mensajitos de telcel, ni tiene mail, ni computadora. Es más, si acaso se cambia su traje es para disfrazarse de alguna persona más, pero él tiene su traje pegado a la piel. Él es su traje, y su máscara es su rostro -algo así como el Santo, enmascarado de plata, que su rostro es la máscara plateada-, y lleva en su piel-traje la bandera de su nación. Es decir, representa los valores y sueños de su nación; libertad, justicia, igualdad, tolerancia, derecho a la felicidad, etc etc. Al matarlo, han matado todos esos valores, y en su lugar, han afirmado a Tony Stark como el hombre del futuro que es hoy.

Él representa los valores de nuestra época. Algunos dicen que no se puede hablar de "posmodernismo", porque el "modernismo" aun tiene mucha tela de donde cortar, y aun no se han llevado a cabo todos los proyectos de este último, pero es precisamente el "posmodernismo" el que viene a mostrar la imposibilidad de que los proyectos del modernismo se puedan llevar a cabo. Desde que la cosa y la palabra dejaron de ser esencias inmanentes, desde que la palabra no representa a la cosa, todo cambio, y podemos pensar que la palabra democracia no encierra ya eso que los partidos políticos y el gobierno "fingen" buscar para la gente. Levantar a Tony Stark, como Iron Man, como el nuevo superhéroe que representa los nuevos anhelos y valores de una nación, es mostrar que hoy la verdad ya no es, en esencia, verdadera; que la democracia y todos esos elementos que busca una nación, una civilización como ejemplo de que es una nación iluminada, en constante y eterno progreso, son totalmente sintéticos, inventables, e imposibles de que tengan existencia fundamental, de origen, divina, real, esencial. No, los valores de una nación se inventan.

Iron Man es el superhéroe del siglo XXI, posmoderno, inventado. Encierra al hombre posmoderno, que es frágil, de pensamiento frágil, que ya no cree en la esencia del hombre, que ni siquiera cree que exista el hombre como tal, que tiene que ser inventado si acaso queremos que realmente exista. Incluso Iron Man es el héroe tecnócrata, la tecnología tomó el lugar de Dios, y es quien domina y dirige toda la existencia del hombre.

En la muerte del Capitán América está el mensaje de que la nación ideal dejó de existir, y comienza a existir la nación como invención, a partir de que Iron Man se levanta como el nuevo sueño de la razón.

Lo sorprendente se encuentra en unas palabras: "No encontramos en la red a Tony Stark... No, él no está en la red, Él es la Red". Iron Man es la Red, y quien es la Red, domina el mundo. Iron Man representa a ese hombre, o superhombre posmoderno, que ha venido a ocupar el lugar que dejaron vacíos Dios y el hombre, y como dice Deleuze, "Como diría Foucault, el superhombre es mucho menos que la desaparición de los hombres existentes, y mucho más que el cambio de un concepto: es el advenimiento de una nueva forma, ni Dios ni el hombre, de la que cabe esperar que no sea peor que las dos precedentes" (Gilles Deleuze, Foucault).

El cómic, entonces, tiene la seriedad que Elijah Price, el personaje que representa Samuel L. Jackson en El protegido, y Umberto Eco, le imprimen. Es la lectura de una sociedad que está en busca de héroes, de hombres que superen a los mismos hombres, superhombres que no sean frágiles como lo son los verdaderos hombres, los hombres existentes, de carne y hueso. Representan la lucha entre el bien y el mal, entre la razón, la cordura, y la demensia, la locura más extrema. Y aun cuando hay críticas a ese mundo fantástico y de ciencia ficción que es el mundo del superhombre de cómic, como fue el caso de la crítica que le hicieron a Spiderman por haber permitido que fueran destruidas las Torres gemelas, y un Spiderman angustiado, entristecido, menos heroíco que un bombero o un policía, explica, en sus pensamientos, que aun cuando sean héroes superpoderosos, no pueden llegar a saber cuándo se dará una tragedia humana -¿tampoco el Santo supo de antemano que iba a temblar en el 85 y que muchas personas perecerían en el DF?- , entonces, aun con todo eso, el superhombre sigue construyendo un discurso que puede elevar hasta niveles inimaginables la fe, esperanza y amor del hombre común y corriente.

¿Por qué poner toda la fe en un cuento? ¿Por qué creer que ellos pueden representar a una humanidad mucho más evolucionada, más poderosa, casi divina? ¿Por qué perder tiempo en ir a buscar el número atrasado a algún puesto de periódicos, o estar al pendiente del nuevo número que está por salir?

En el cómic está en juego algo más serio, mucho más serio. Y tal vez el que gusta del cómic no es que siga siendo un niño en el fondo, sino que la historia de la humanidad sigue construyendo a todos sus personajes, mitológicos, y después echa a andar toda una maquinaria que les dará vida: Así es como podríamos pensar en Aquiles, Hércules, Abraham, Isaac, Ismael, Jacob, Israel, Buda, Pablo, Jesucristo, Hulk, Spiderman, Superman, Batman, Iron Man.

El mundo entero siempre ha trazado en dibujos su historia. Desde Egipto, hasta los teotihuacanos, pasando por las cuevas con arte rupresente, y los impresionistas, hasta llegar a los dibujantes de cómics, los hombres de carne y hueso han hecho dibujos o han escrito cosas fantásticas acerca de sus héroes, de esos superhombres que vinieron de muy lejos y fundaron una civilización y que les trajeron el fuego del conocimiento.

Tal vez, la Torre de Babel, sea la confusión necesaria para que salieran de sus muros todos estos héroes que han desfilado en la historia de la humanidad. Y así, quizá Aquiles le ha dado la mano al Capitán América, y todos ellos han permitido que de esa misma Torre de Babel venga Iron Man, para mostrar que el superhombre ya está aquí, que el futuro ya no es un horizonte sino un momento, que la posmodernidad no es un paréntesis muerto, sino que es el cumplimiento de la profecía más próxima que tenemos.

Desde la Torre de Babel Dios dejó un lugar vacío, el hombre dejó un lugar vacío, y Iron Man vino a llenar ambos lugares. Con Deleuze, esperemos que no sea peor que los que le precedieron.

El cómic, entonces, es una nueva forma de estructurar la Torre de Babel; nuevos lenguajes, nuevas concepciones, nuevos hombres, superhombres y nuevos dioses, y la mente se estructura de otras muchas formas.